Couyoumdjian, Juan PabloTocornal Court, María Josefina2020-06-102020-06-102020http://hdl.handle.net/11447/3289Tesina presentada a la Facultad de Gobierno de la Universidad del Desarrollo para optar al grado académico de Magíster en Políticas PúblicasA partir de la década de 1990 un grupo de autores, en su mayoría europeos, ha abordado el problema de la conservación del patrimonio cultural desde el punto de vista de la economía, analizando las características particulares de este tipo de bienes y las imperfecciones que se generan en sus mercados. Estos economistas concuerdan en que los bienes que una comunidad reconoce como parte de su patrimonio cultural, y especialmente aquéllos de tipo material, tienen el carácter, al menos parcial, de bienes públicos, desde el punto de vista de su consumo. Esta condición explica gran parte de los “fallos” que se producen en el mercado de bienes y servicios ligados al patrimonio cultural, y que justifican en último término la intervención del Estado, para intentar corregirlos a través de distintos tipos de políticas públicas. En los países anglosajornes, por ejemplo, se han puesto en marcha diversos mecanismos que buscan incorporar las externalidades positivas asociadas al patrimonio cultural, generando incentivos y arreglos institucionales para acercar la producción de estos bienes a su óptimo social. Para el caso de Chile este tema fue tratado en 1999 por Klaus Schmidt-Hebbel y Magdalena Krebs, quienes analizan las políticas públicas de protección del patrimonio cultural existentes en ese momento en nuestro país, las instituciones del Estado involucradas, sus modalidades de intervención y los recursos fiscales y privados destinados a este tema1 . El artículo termina con algunas propuestas de reformas a las políticas de protección del patrimonio cultural Siguiendo en parte ese esquema de análisis el presente trabajo se enfoca en el período comprendido entre 2000 y 2017, y su objetivo es determinar en qué medida hemos avanzado -o no-, durante las últimas dos décadas en cuanto a instrumentos de protección del patrimonio cultural, recursos estatales destinados a este fin y, en definitiva, en la modernización y diversificación de esta área específica de las políticas públicas. A modo de conclusión y teniendo a la vista la instalación del nuevo Ministerio de las Culturas, las Artes y el Patrimonio, a partir de abril de 2018, planteamos algunas ideas sobre la orientación que nuestras políticas de patrimonio cultural debieran adquirir, a nuestro juicio, en los próximos años. En términos generales postulamos que estas políticas deberían apuntar a promover la cooperación entre el Estado, los actores privados y la sociedad civil, en la conservación y puesta en valor de los bienes, tangibles e intangibles, que conforman el patrimonio cultural de Chile. Sólo así podremos asegurar que muchos más chilenos, no sólo los de hoy sino también los de mañana, puedan conocer, valorar y disfrutar estos inmuebles, objetos o expresiones culturales, reflejo de nuestra identidad como país y por lo tanto factor de cohesión social, y legarlos con orgullo a las nuevas generaciones.83 p.esPatrimonio culturalChilePolítica públicasConservación060001SEl Estado de Chile y el patrimonio cultural: evolución de los instrumentos y recursos públicos para su protección (2000- 2019)Thesis